Hombres en Crecimiento
Una propuesta para humanizarnos y convertirnos en referentes sanos para las generaciones que nos preceden.
Ser hombre, al igual que ser mujer, nunca ha sido fácil; la sociedad nos ha presionado hacia un lugar u otro desde tiempos inmemoriales.
En la actualidad, necesita que cambiemos, y quiere que lo hagamos ya. Pero venimos de donde venimos y carecemos de referentes sanos en los cuales inspirarnos.
Ante esta falta, solo tenemos una opción: convertirnos en nuestro auto-referente a partir de la propia experiencia.
Para quien es
Para todos los hombres sin importar su procedencia, sus creencias, su color de piel, sus gustos, su apariencia física, sus preferencias sexuales, sus hobbies o a lo que se dedican.
Es para hombres que quieren encontrar su lugar en el mundo, que quieren ser más libres de su pasado, que tienen ganas de descubrir nuevas formas de relacionarse con los demás, con su familia, con sus seres queridos, con sus amigos y sus compañeros de trabajo.
También es para hombres que no se sienten satisfechos con la vida que llevan, que quieren realizar algún cambio pero les parece que no saben cómo hacerlo.
Si te da reparo, es normal
Si sientes curiosidad y al mismo tiempo te da reparo, es normal. Te invito a que vengas y pruebes, a que en vez de darle voz a los prejuicios y te hagas pajas mentales, dejes que sea tu propia experiencia lo que te diga si este grupo es para ti.
A muchos nos cuesta admitirlo, pero la verdad es esta: si los hombres no hacemos trabajo personal es debido, principalmente, a que estamos acojonados. Tenemos tanto miedo de bajar la guardia y encontrarnos cara a cara con nuestra vulnerabilidad, que hacemos todo lo posible por evitarlo.
Sin embargo, nuestra verdad más profunda, nuestra autenticidad y nuestra capacidad de amar de manera honesta se encuentra, precisamente, en esa vulnerabilidad.
Para cruzar el umbral que el miedo representa y acceder sin reservas a nuestro corazón, necesitamos tres cosas: coraje, entrega y compasión. Tengo comprobado que la mejor manera para desarrollar estas capacidades es haciéndolo acompañado y respaldado de otros hombres, hombres en los que podemos reconocernos y que terminan siendo compañeros de viaje.
Los encuentros
Nos encontramos dos veces al mes en formato quincenal.
Las sesiones tienen una duración aproximada de 2 horas.
La base del trabajo es la Gestalt, una metodología humanista, rigurosa y de profundo calado, cuyos preceptos son la atención en el aquí y ahora, la presencia y la responsabilidad.
Confidencialidad
En el trabajo de desarrollo personal sale a la luz lo más hermoso y lo más desdeñable de cada uno, sus luces y sus sombras. Sin embargo, todo lo que ocurre en el grupo, se queda en el grupo.
El respeto y el cuidado por la verdad y la vulnerabilidad del otro surgen de manera espontánea.
En el trabajo con hombres dejo de lado conceptos de moda como el de «nuevas masculinidades». Cada uno de nosotros tiene una experiencia única de lo que significa ser hombre, y eso es lo que vamos a explorar.
Este es un espacio seguro en el que poco a poco aprendemos a ir contactando con la propia experiencia, que es donde se encuentra la propia verdad y nuestro ser más auténtico. Desde ahí, trabajamos para integrar aquellos aspectos que formaban parte de nosotros de manera intrínseca y que tuvimos que rechazar para poder encajar en el marco familiar, social y cultural.
Es a través de este contacto con uno mismo como podremos estar verdaderamente presentes en lo que hacemos y vivimos.
Algo de lo que hacemos
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REVISAMOS NUESTRO SISTEMA DE CEENCIAS
Revisamos cuales de nuestras creencias nos ayudan a vivir plenamente y cuales de ellas bloquean nuestro potencial humano. Esta es una parte crucial del trabajo que hacemos y puede ser realment transformadora.
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AMPLIAMOS NUESTRA CONSCIENCIA
Ampliar la consciencia que tenemos de nosotros mismos nos permite descubrir nuestra realidad más allá de lo que nos contamos. ¿Quién soy más allá de este personaje? ¿Qué hay más allá del concepto que tengo de mí mismo?
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CREAMOS UNA COMUNIDAD DE SOPORTE
Los hombres, cuando quedamos, no es para hablar de lo que nos aflige: hablamos de fútbol, de motos, de mujeres, de trabajo... Está bien, pero también nos conviene crear una red de soporte emocional.
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NOS ACTUALIZAMOS
Sin apenas enterarnos, la mayoría de nosotros seguimos respondiéndole a la vida como cuando éramos un crío. Es importante, si queremos estar presentes en la vida, actualizar nuestro guión de vida.
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CONTACTAMOS CON NUESTRO SENTIR
El sentir es la capacidad más importante a tener en cuenta si queremos tener una buena salud física, psíquica y emocional. Cuidar el sentir enriquece nuestra vida de forma exponencial.
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NOS ACOMPAÑAMOS Y COMPARTIMOS
Aislarnos y querer resolverlo todo solos es maltratarnos. Aquí aprenderemos a pedir ayuda y a ayudar a otros como nosotros de forma honesta, sincera y respetuosa.
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IDENTIFICAMOS NUESTRAS HERIDAS Y BLOQUEOS
Todos estamos heridos en alguna parte de nuestro ser. Estas heridas nos anclan en el pasado, impidiendo que podamos avanzar hacia donde necesitamos y queremos ir. Parte del trabajo es levar el ancla y navegar hacia nuevas aguas.
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TOMAMOS NUESTRA RESPONSABILIDAD
Aprendemos a atender nuestras necesidades, físicas, psicológicas, emocionales, espirituales, vocacionales, etc. Nos liberamos de excusas, de automanipulaciones, para tomar la vida en su totalidad.
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NOS HACEMOS MÁS HUMANOS
Este trabajo nos humaniza, nos acerca a quien somos realmente, nos permite desarrollar una armonía interna entre lo que pensamos, sentimos y hacemos. Esto nos permite sentirnos más completos y satisfechos.